martes, 16 de agosto de 2011

El Requesón.



     Sin duda, este es uno de esos temas que me apasionan. Parece imposible pensar que en la época en la que vivimos, pueda seguir existiendo esta sustancia genital pestilente. Así que, inocente de mi, durante años creí que se trataba de un mito urbano. Pero no, nada mas alejado de la realidad. El requesón existe señores, y puedo dar fe de ello. Para aquellos que no sepan de lo que hablo, os ilustro un poco.

     Requesón = Esmegma. Sustancia blanquecina y maloliente que se forma entre el glande y el prepucio.

     Y es que resulta, que sse está poniendo de moda eso de no tirar el pellejito hacia atrás en la hora del baño. El jabón no toca la zona en cuestión. Cada día son mas los casos que llegan a mis oídos, y yo personalmente jamás entenderé el porqué. ¿Qué es lo que buscan esos seres, guardarlo cual reserva del 94, ó para untar en la tostada matutina?. No hay nada mas desagradable que ponerte frente a frente dispuesto a darle placer y que ese olor nuble todos tus sentidos. Bueno, al menos al intentar chuparla ya te das cuenta de su existencia y huyes como alma que lleva el viento. Peor resulta cuando tu mano es la que actúa y al mirártela te encuentras restos ya cuajados y fermentados del tiempo que llevan ahí. Es uno de esos momentos en los que deseas morir. Pero lo mejor es cuando, con cara de circunstancia preguntas en voz alta: ¿esto que es?, y su dueño se queda como si no fuese con él. A lo mejor es que hasta se siente orgulloso de su requesón de crianza.

     Por eso chicos, una de las normas básicas de este Código Gay, es el cuidar la higiene genital. Todos lo agradeceremos.

martes, 9 de agosto de 2011

Perfil psicológico: Psicópata.



     Tener un nuevo rollete siempre resulta emocionante. Partir de cero con alguien, darte a conocer y estar en guardia ante cualquier detalle que te diga más de él. Pero no siempre topamos con la mejor elección y a veces caemos en un auténtico martirio. Y es que existe un tipo de hombre que se convierte en un pelmazo, que pretende introducirse en tu vida desde el minuto uno, en vez de ir despacio y dejar que las cosas vayan siguiendo un proceso natural. A ese perfil es al que suelo llamar el "Psicópata".

     Muchas veces en la peluquería o en casas de amigas me topo con revistas tales como el Marie Claire y el Elle. Siempre me ha hecho gracia la manera que tienen de tratar temas como Claves para que tu relación triunfe ó ¿Es tu chico la elección perfecta?. Por eso he pensado que es de vital importancia establecer las premisas fundamentales para detectar al tío coñazo que pretende convertirse en tu novio solo porque os enrollasteis una vez. Pero tranquilos, no soy como esas revistas femeninas cuyo único fin es aconsejar el como ser una buena esposa sumisa, como mantener un hombre a tu lado para no acabar como una solterona amargada ó mil paridas de ese estilo. Lo único que espero es evitaros lo incómodo que resulta tener 20 llamadas perdidas de esa persona cada día.

Claves para identificar al psicópata.

  • Al liarse contigo, no hará mas que alabarte. Insistirá en lo bien que besas, lo guapísimo que eres y cosas por el estilo.
  • Al minuto uno de despediros, ya te enviará un mensaje refiriéndose a lo maravilloso que de haberte encontrado.
  • Nunca se conformará con tenerte localizado por un solo medio de comunicación. En solo 24 horas se habrá echo con tu móvil, tu cuenta de correo electrónico y todos los perfiles sociales que tengas.
  • Te llamará a todas horas. Por mucho que tu le digas que estarás ocupado, él se lo pasa por el forro y sigue llamando. Un error que debéis evitar es dejaros el teléfono en casa, porque de tanto como insiste, vuestra madre creerá que es importante y hablará con él.
  • En el messenger no parará de ponerte la webcams, y no pretendas mantener una conversación interesante. Todo girará en torno a su idealización de ti y a cuando quedaréis en persona.

lunes, 8 de agosto de 2011

Las Mariliendres.



     Entre el gran surtido de tipos de mujer que habitan el ambiente, sin duda el más peligroso es el de las mariliendres. Como tal, definimos a este espécimen como chicas poco agraciadas (y no se porque, la gran mayoría con algunos kilos de más), que tras sentirse frustradas socialmente en Heterolandia, buscan refugio en los brazos de su gran amigo gay. Por regla general, la relación entre ambos se forja durante la adolescencia. En pleno instituto, la impopularidad de ella, y el echo de que él está siendo objeto de burlas por sus compañeros, hace que se unan en una bonita amistad. Hasta aquí todo bien. Todo se complica cuando el chico gay cumple los 18 y por tanto tiene vía libre para corretear por el ansiado mundo rosa. Ella se ve arrastrada a frecuentar los mismos lugares, acompañándolo como su fiel escudera.

     En los estupendos años dorados que según la mariliendre vivió con su chico gay, compartieron todo cuanto era posible. Una relación de hombre y mujer libre de cualquier tensión sexual. Pero la pobrecilla lo ama en secreto, y lo guarda a su vera como un tesoro. Y es justo aquí donde radica el problema. Lo guarda tan bien, que su única misión es evitar a toda costa que nadie se lo quite.

     ¿Alguna vez habéis intentado ligar con un tio custodiado por su perra carcelera?. Yo sí, y os prometo que ha sido la única vez en todos mis años pisando el ambiente en que desee darle un guantazo a alguien. Allí iba yo, con toda la seguridad del mundo para hablar con el chico con el que me lié semanas atrás, dispuesto a conseguir un poco más esa noche. Todo fué muy bien, hasta que de la nada aparece ese tapón regordete dándome empujones y diciéndome que dejara a su futuro marido, que era de ella ( así tal cual, y se quedó tan pancha, obviando el detalle de la pérdida de aceite de su "amor"). ¿Perdona?.... En un principio, inocente de mí, creí que se trataba de una broma, pero que va. No me dió ningún tipo de tregua. Mientras tanto, el otro nos miraba con todo el cuajo del mundo sin mediar palabra. Fue todo tan patético. Miré al lado y me tentó la escalera. Un empujoncito y esa bolita hubiese rodado de lo lindo, pero tube que hacer un gran esfuerzo para contenerme.

     Así pues os recomiendo que evitéis amistades como esa, si vuestra intención es comeros algo. De lo contrario, se encargará de espantarlos a todos, ya sean malas o buenas oportunidades. Y si elo caso es que os gusta un gay con mariliendre de mochila, olvidarlo, porque no habrá manera.



domingo, 7 de agosto de 2011

Gays de taitantos.




     Por regla general, los homosexuales al rondar cierta edad, parecen sufrir un cambio de actitud. Y digo parece porque simplemente es una fachada. La única realidad es que son los mismos que años atrás, solo que operan de forma diferente debido a lo que se espera de ellos.

     Hombres de veintitantos, y hombres de treinta ó cuarenta, no son tan diferentes. A ambos les gusta echar un polvo y les gusta gustar. Solo que, mientras los jóvenes se besan en medio de la pista, salen a la parte de atrás a follar y luego les cuenta a sus amigos cada pormenor de la jugada; los hombres de mayor edad operan desde la clandestinidad, en el cuarto de baño donde nadie se percata de nada.

     No digo que la discreción sea malo, pero si cuando se reprime los institos básicos simplemente por el que dirán. Me parece muy hipócrita.

Discreción por timidez..... SI
Discreción por apariencia.... NO

     Si te apetece besar a alguien, coges y lo haces. Es preferible eso, a estar esperando en el baño mientras finges peinarte ó que te colocas bien la camisa. Luego cuando ve aparecer al pobre chico ¡zás!, empujón al retrete y pestillo cerrado.

     Con su actitud no hacen mas que crear un supuesto estatus de clases gay, entre los que encontramos según ellos a niñatos desbocados, ó adultos hechos y derechos. Pues a mi humilde opinión, prefiero a esos niñatos valientes que actúan sin importarles lo mas mínimo su alrededor.


     POSDATA: Este texto se lo quisiera dedicar a varios amigos, cuyos gustos tiran hacia gays de taitantos. Pobres de ellos, que para poder ligárselos se ven obligados a pasar gran parte de la noche en los baños. Mi mas sentida solidaridad para con vosotros.


viernes, 5 de agosto de 2011

Presentación.




     Cada año, mujeres de veintitantos llegan a Nueva York en busca de las dos T: Tiendas y Tíos. Hace 20 años yo era una de ellas...
     
     Que más quisiera ser yo la pizpireta Carrie Bradshaw dando tumbos por Nueva York sobre sus manoletes y con un Cosmopolitan en mano. Pero bueno, por soñar que no quede. La realidad es bien distinta, pero no por ello peor. Sonaría mas bien así:

     Cada verano, gays de veintitantos vuelven a la costa por dos motivos: son naturales de aquí y estudian el resto del año fuera; ó son extranjeros disfrutando de unas ¿merecidas? vacaciones (no sé que hace cada cual en su vida como para afirmarlo). El caso es, que sin excepción todos buscan las dos "S": Sol y Sexo. Hace unos años pertenecía al grupo de los que volvían tras un intenso curso. Pero el chollo se me acabó, y terminados los estudios, pase a la casi extinguida raza de los perennes costeros. Pronto le cogí el tranquillo a lo del sol, poniéndome aftersun en abundancia después de exfoliarme con una de esas esponjas tipo estropajo. Ya solo quedaba concentrar todos mis esfuerzos en el sexo. Pero resulta que en ese campo no es tan fácil reconocer las falsificaciones... hasta que ya la tienes dentro. Por eso hace falta ayuda para descubrirlas. Mucha ayuda.

     Mi nombre es Enri, y soy el escritor de este blog. Fin de semana tras fin de semana, mis amigos han sido mi salvación, y en los textos que posteriormente relatare, fuente de inspiración. No os toméis el código al pie de la letra, pues puedo compararme con Carrie, pero jamás con Moisés y sus tablas de la ley. Es mejor vivir intensamente sin ningún código, descubriendo cada cual el ambiente según su andadura. Pero cuando os pase algunas anécdotas parecidas, no me digáis luego que no os lo advertí. Solo me queda desearos una feliz lectura.




Portada.